Carta:
Que sería yo quien muriera atropellado y no tú… Que desde el primer momento que te vi paralizada en mitad de esa calle fría y oscura sabría que me interpondría entre el coche y tú.
Que serias tú y no yo, quien viviera… Porque sabía que de no a verme interpuesto entre el coche y tu… Yo viviría… Y tu… morirías…
¿Pero sabes que hice? Salvarte la vida…
Y es por ello que cuando me atropello sabía que me estaba muriendo…
¿Y sabes que paso? Que el tiempo se paro y me regalo un último minuto de vida… Porque lo último que quería era despedirme de ti… Y lo último que te quise decir era…
"Cuando vea en la noche, estrellas brillar....Sabrás que estoy ahí arriba, entre las estrellas. ¿Y sabes que haré? Sonreír...”
1 comentario:
La verdad es que la mayoría de las veces no nos damos cuenta de lo importantes que son los minutos en nuestras vidas, todo lo que podrían cambiar en ellas si los usáramos a conciencia siempre, sin perderlo por cosas insignificantes, y aprovechándolo con aquello que de verdad vale la pena. Y más cuando hay alguien especial de por medio que espera algo de nosotros, o simplemente hay algo que le queremos ofrecer. Me ha encantado ^^ Y la frase final de las estrellas... increíble!! Me encanta, besos!! :D
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